En el cambio climático habrá convertido el planeta en un lugar muy diferente al actual. La variación en el clima afecta geopolíticamente a toda la población, no se trata de una simple subida de temperaturas. Los ciclos y las estaciones como las conocíamos ya no existirán. La convivencialidad se trata de un concepto desarrollado por el austríaco Iván Illich (1926 – 2002) que nos ayuda a entender el problema de habitabilidad que se presenta. Hace referencia a la relación entre la sociedad y sus herramientas, sus tecnologías. El cambio climático es consecuencia de una falta de convivencialidad, la actividad económica ha crecido ilimitadamente, dejando de servir a sus objetivos y generando enormes problemas.
Una herramienta puede ser un martillo, pero también una carretera, un hospital o una universidad. En principio, son medios utilizados para lograr los mejores resultados, mejorar la comunicación, salud y educación en los ejemplos mencionados. Sin embargo, superado cierto umbral en el uso de energía, no logran sus objetivos y generan importantísimos daños ambientales. En el caso del transporte cualquiera que conozca el tránsito vehicular de una ciudad en hora punta sabrá lo lento e incómodo que puede ser ir en coche.
Los vehículos que funcionan con combustibles fósiles emiten contaminantes entre los que se encuentran gases efecto invernadero, como el dióxido de carbono. La construcción de carreteras ha atentado contra la vida natural en territorios de todo el mundo. Ya existe un consenso científico y político (al menos en la mayor parte de Europa) para transitar a otro modelo económico y de transportes. Con ello está habiendo una fuerte apuesta por los vehículos eléctricos y las peatonalizaciones.
Problemas del cambio climático
A la hora de abordar los problemas del cambio climático, una de las cuestiones más llamativas es la subida del agua de los océanos por el derretimiento de los casquetes polares. Es una consecuencia directa del calentamiento global. Además, esto hará desaparecer importantes territorios, como varias islas situadas en el Pacífico que ya están buscando soluciones a su situación de refugiados climáticos. Todas las costas mundiales se verán afectadas, desapareciendo muelles y playas.
El cambio climático también nos trae lluvias más escasas y fuertes, más huracanes y terremotos. Aunque los agricultores ya están poniendo todo su empeño en adaptarse, muchos territorios dejarán de poder producir aquellos productos de los que viven, como el café en algunas regiones de Centroamérica.
Causas del cambio climático
Es la actividad humana (factores antropogénicos) la que ha provocado el cambio climático. Desde, al menos, la mitad del siglo XX, el paradigma dominante ha sido el desarrollismo, la ideología economicista que parte del supuesto de que un crecimiento constante e ilimitado en los sectores adecuados lleva invariablemente al bienestar y es la receta para solucionar cualquier problema. Esta forma de pensar ha legitimado la producción en masa y el sometimiento del entorno a la economía. La contaminación del aire y del agua no había sido castigada internacionalmente hasta la existencia del Protocolo de Kioto.
Un acuerdo que solo fue vinculante para quienes lo ratificaron, y donde las consecuencias de contaminar se tradujeron en, únicamente, la compra de «derechos de emisiones» por parte de unos pocos de países desarrollados. Desde aproximadamente los años 70 la crítica ecologista al modelo desarrollista es lo suficientemente fuerte como para hacer cambiar las políticas. Con ello se reduce la industrialización en los países centrales. También se apuesta por los servicios y el «desarrollo sustentable», es decir, por tecnologías «verdes» (más eficientes energéticamente). Además de circuitos cerrados de la materia (reciclaje) y subvenciones públicas a sectores estratégicos.
Las causas del cambio climático son globales. La contaminación que se produce en cualquier país afecta al conjunto, aunque de forma desigual. Los lugares con más recursos tienen más posibilidades de afrontar con éxito el reto. Con el calentamiento global los lugares más fríos se harán más solicitados, los más calurosos serán inhabitables. Los sumideros de carbono tienen un valor en constante crecimiento.
Convivencialidad
La falta de mitigación del cambio climático obliga a ser eficaces con las políticas de adaptación. Generar un entorno que favorezca una convivencia sana y pacífica es uno de los objetivos prioritarios de universidades y centros de investigación. El conocimiento y la investigación sirven para proponer y llevar a cabo soluciones a los problemas reales de la vida.
En la relación entre el humano y su entorno está la clave para tener un espacio habitable. Si la avaricia es ilimitada y no existen derechos de conservación, todo el planeta será explotado. Afortunadamente, gran parte de la población mundial se niega a vender el lugar en el que ha vivido y es capaz de mantenerlo en su uso tradicional y ecológico. También, muchos gobiernos y otras organizaciones se encargan de proteger espacios naturales. El valor de estos hechos es inmenso a la hora de mitigar el cambio climático.
Cambio climático
Cuando hablamos del futuro siempre nos basamos en estimaciones, modelos matemáticos e hipótesis. Es imposible predecir qué va a suceder, aunque es posible afirmar lo más probable, en caso de darse ciertas variables. Los expertos del IPCC urgen reducir las emisiones para que el calentamiento no sea mayor de 1,5 grados centígrados (°C) en las próximas décadas. Para ello es necesario que los yacimientos de petróleo ya encontrados no sean extraídos.
Algo que hoy día no parece que vaya a suceder, mucho capital se perdería. El panorama es desigual, algunos lugares (en todo el mundo, aunque especialmente en Europa) han conseguido reducir las emisiones en su territorio. A su vez están logrando hacer una transición a energías 100 % renovables en muy poco tiempo; en otros las condiciones de vida son cada vez peores. La transición ecológica que se está llevando a cabo significa que en 2050 es posible que siga habiendo lugares convivenciales.
Por otra parte, el alta en su cotización irá acompañada de la imitación y difusión de sus valores, aunque en los lugares con menos recursos la situación llevará invariablemente a la emigración forzada. La forma en que los países centrales acojan a los refugiados climáticos es clave fundamental para mantener la paz. El sistema jurídico internacional necesita adaptarse a este reto de la humanidad de <strong y el cambio climático.