Conseguir un buen posicionamiento orgánico es básico para sobrevivir en Internet. Seguramente habrás escuchado o leído la frase “si no estás en Google no existes”. Lo cierto es que, si no apareces en los primeros resultados de búsqueda de Google, no existes. Es decir, necesitas un buen posicionamiento en los buscadores de Internet. Google es el más usado en todo el mundo. Aunque también existen otros como Bing, que pertenece a Microsoft, o Yahoo, que fue el primero en aparecer.
Pero, ¿por qué es tan importante ocupar los primeros puestos en los resultados de búsqueda? Esta pregunta tiene fácil respuesta, únicamente tienes que pensar en tu propio comportamiento cuando buscas algo en Internet. Generalmente, escribes una o varias palabras en el buscador esperando encontrar lo que buscas. Instintivamente prestamos atención a los resultados que aparecen en los primeros puestos, es decir, los que tienen un buen posicionamiento. ¿Cuántas veces pasamos a la segunda página de resultados para encontrar lo que buscamos? No nos engañemos, normalmente si lo que buscamos no aparece en la primera página de resultados, realizamos una nueva búsqueda.
Dicho esto, entendemos que tener un buen posicionamiento pasa por aparecer en la primera página de resultados de los buscadores. ¿Cómo lo conseguimos? La clave de ello está en una buena estrategia SEO (Search Engine Optimization). En español significa optimización para motores de búsqueda. Si te suena a chino, continúa leyendo, porque es más sencillo de lo que piensas.
Cómo funcionan los buscadores de Internet
Casi toda la información que podemos imaginar, hoy en día, se encuentra en Internet. Todo el contenido (o casi todo) está indexado. Es decir, se ha identificado, localizado y clasificado. Esta labor la realizan los motores de búsqueda. Cada vez que se publica un contenido nuevo en Internet, estos motores lo analizan. A través de las palabras y frases, y por medio de algoritmos, los motores detectan la temática del contenido. “De acuerdo”, pensarás, “los contenidos están ahí, sin embargo, ¿por qué unos aparecen mejor posicionados que otros en las búsquedas?” Aquí entra en juego el concepto de la relevancia.
Los motores de búsqueda no saben de antemano qué contenidos van a resultar más relevantes para los usuarios. Es a través de las búsquedas, y según la concordancia de estas con los contenidos, como se establece el grado de relevancia. Por tanto, una mayor relevancia será sinónimo de un buen posicionamiento. El motor de búsqueda intentará ofrecer al usuario el resultado cuyo contenido tenga mayor concordancia con sus términos de búsqueda. El usuario espera encontrar a la primera aquello que busca. El buscador, como proveedor de servicios que es, intentará satisfacer esa necesidad.
Por tanto, para conseguir un buen posicionamiento, nuestro contenido deberá estar enfocado a aparecer en resultados de búsqueda. Cuanto más nos aproximemos a los términos de búsqueda directa, más probabilidades tendremos de aparecer en primeras posiciones. Aquí es donde entra en juego el SEO y debemos aprender cómo hacerlo para ser relevantes. Un buen SEO es sinónimo de un buen posicionamiento. Es importante conocer las herramientas que tenemos a nuestro alcance para conseguirlo. Además, existen claves o trucos que nos permitirán ocupar los primeros puestos en el ranking de resultados de búsqueda.
Estrategia SEO: obtener un buen posicionamiento orgánico
Para que nuestra estrategia SEO sea efectiva, debemos conocer a nuestro público, ponernos en su lugar. Entender cómo van a realizar las búsquedas que les lleven a nuestra web será fundamental. Además, el enfoque también variará según el tipo de web que gestionemos. No es lo mismo un blog o una web de noticias que una tienda online. El objetivo es el mismo: un buen posicionamiento. No obstante, plantearemos distintas técnicas para conseguirlo. De hecho, el comercio electrónico se servirá de blogs para incrementar el tráfico web. Un buen posicionamiento comienza por adaptar los contenidos web al SEO.
En una tienda online, las descripciones de los productos deberán incluir palabras clave. Si alguien busca un producto que vendemos, la descripción de nuestro producto debe concordar con su búsqueda. De hecho, si el título SEO del producto coincide con sus términos de búsqueda, la relevancia será total. Cuando hacemos una búsqueda en Google, los primeros resultados coinciden exactamente con las palabras introducidas. Si buscamos «comprar zapatillas deportivas», el primer resultado será uno que lleve por título «comprar zapatillas deportivas». Quien ha elaborado ese contenido SEO sabía lo que tenía que hacer para conseguir un buen posicionamiento. De todos modos, la relevancia va más allá del título SEO.
Es decir, el contenido de la página debe tener una clara relación con el título. Es entonces cuando haremos uso de las palabras clave. Si hablamos de un producto de una tienda online, la descripción del mismo será determinante. Los términos que se utilicen ayudarán a los motores de búsqueda a identificar dicho contenido. La descripción debe incluir los elementos que lo componen, sus dimensiones, sus materiales y sus posibles usos. La persona que busca unas zapatillas de running, espera encontrar unas zapatillas running, no unos tenis. Una buena descripción favorecerá un buen posicionamiento.
Conseguir un buen posicionamiento con un blog
Los blogs se han convertido en una de las fuentes de información más extendidas. Además, han adquirido el valor de fuentes especializadas, por lo que la audiencia confía en ellos. Este detalle no ha pasado desapercibido para las empresas que ofrecen productos o servicios online. A día de hoy, casi todas cuentan con un blog para garantizarse un buen posicionamiento. Pero, ¿cómo un blog puede ayudar a una tienda online a tener un buen posicionamiento? ¿Y a una empresa que ofrece servicios?
Bien, no hay que ir muy lejos para entenderlo. Si estás leyendo este artículo, puedes tomarlo como ejemplo. Seguramente lo has encontrado porque buscabas información sobre cómo conseguir un buen posicionamiento para tu web. Aquí ves algunas de las claves para conseguirlo. Obviamente, al tratarse de un artículo, no se puede profundizar al detalle en cada aspecto. Sin embargo, si haces clic en las palabras buen posicionamiento, accederás a la información de un curso completo. Dicho curso aborda cada uno de los aspectos del SEO, así como otras herramientas para poder conseguirlo.
Conseguir un buen posicionamiento con redes sociales
No solo los blogs permiten transmitir una imagen de experto en la materia. Si tenemos redes sociales, algo muy común en la actualidad, también podremos potenciar esa imagen. Publicaciones interesantes y consejos relacionados con nuestro ámbito atraerán a nuestra audiencia potencial. El objetivo de tener un buen posicionamiento es llegar a nuestro público con mayor facilidad. ¿Qué mejor manera de hacerlo que teniendo a nuestros potenciales clientes como seguidores de nuestras redes? Por ejemplo, si vendemos productos nos serviremos de Pinterest para mostrarlos organizados por categorías. Además, podremos añadirles descripciones que favorecerán un buen posicionamiento de los pines.
En Facebook, con cada publicación, podemos atraer la atención de nuestros seguidores sobre nuestras novedades. Twitter nos vendrá muy bien para darnos a conocer al participar en debates en hashtags relevantes. Instagram es todo imagen, y ya dicen que una imagen vale más que mil palabras. Si vendes productos puedes publicar fotos o vídeos y añadirles una descripción atractiva. Con estos simples consejos, conseguirás que tus publicaciones tengan un buen posicionamiento. Aparecerán en resultados de búsqueda y atraerán tráfico a tu web. Y ya conoces cómo conseguirlo: no olvides incluir enlaces en tus publicaciones que dirijan a una página de tu web. Dicha página debe ser relevante, debe ampliar información o mostrar el producto o servicio que el cliente espera encontrar.