¿Sabías que existe el feedback positivo y negativo? Un comentario u opinión pueden contribuir a mejorar o, simplemente, frustrar a quien lo recibe. En las empresas, a menudo, se reacciona a las acciones de otros de forma errónea. Por lo tanto, y en consecuencia, los resultados no son los esperados.
De este modo, nuestra opinión puede ser un arma de doble filo. Ciertamente, recibir la retroalimentación de nuestras acciones es beneficioso, pero puede convertirse en algo negativo si no se realiza del modo correcto.
Todos hemos estado en una situación donde valoran nuestro trabajo o tenemos que valorar el de otros. Por ello, para todos los miembros de las organizaciones saber cómo hacer una retroalimentación positiva es imprescindible.
¿Quieres aprender a realizarlo en tu empresa? ¡Sigue leyendo!
¿Qué es el feedback positivo?
Podemos entender por el término anglosajón “feedback” un comentario, opinión o retroalimentación. Es decir, un mensaje de vuelta sobre algo que ha sucedido o se ha dicho anteriormente.
Por ejemplo, cuando un trabajador ha elaborado un plan de contingencias y su superior lo revisa y le indica las posibles mejoras. Le está dando información extra sobre su tarea con el fin de que pueda optimizarse.
Sin embargo, también podría felicitarle por haber planteado algunas situaciones de gran valor para la compañía. O, incluso, podría suceder que tras revisar la tarea se dirigiese al empleado furioso destacando todo lo negativo del proyecto con un tono agresivo.
¿Cuál es la opción correcta? Quizás haya dudas con las primeras, pero, evidentemente, la última opción debería rechazarse de inmediato. El feedback positivo trata de transmitir un mensaje que permita mejorar el proceso o aportar soluciones.
Es decir, hay que centrarse en lo bueno del trabajador, en sus puntos fuertes pero ligados a las acciones recientes. De esta manera podrá seguir potenciándolos y optimizándolos. No obstante, no se trata únicamente de felicitar de forma constante sus virtudes.
Beneficios del feedback positivo dentro de las empresas
Es fácil pensar que apoyar a los miembros de una empresa, independientemente de su puesto, aportará un clima laboral positivo. Sin embargo, algunas organizaciones aún están aprendiendo a gestionar el talento y sus actuaciones no siempre son beneficiosas.
Es por ello, por lo que la retroalimentación en positivo debe tomarse como una estrategia más en la consecución de los objetivos. Pues supone un incentivo para la mejora continua y el bienestar de los trabajadores. A continuación, enumeramos algunas de las ventajas que esto puede atraer a los negocios:
- Mayor motivación: los líderes que envían mensajes relacionados con las fortalezas de los trabajadores aumentan la motivación de estos. Por lo tanto, contribuyen al crecimiento de la organización.
- Incrementar productividad: a consecuencia de la motivación, los trabajadores aumentarán su rendimiento. Influirá tanto la confianza en ellos como el reconocimiento de su valor para la compañía.
- Aumentar compromiso: en suma de lo anterior, se hace patente una mayor fidelidad de los trabajadores a la empresa, sintiéndose parte de ella.
- Favorecer la retención de talento: si se les trata bien, se sienten bien y contribuyen a mejorar dentro de la organización; lo más probable es que quieran seguir ligados al proyecto a largo plazo.
Estas son solo cuatro de las cuestiones que puede potenciar tu empresa simplemente con una buena acción de feedback positivo. ¡Ahora te explicamos cómo hacerlo!
¿Cómo dar retroalimentación en positivo de forma correcta?
Ahora que conocemos algunos de los beneficios, seguro que quieres saber cómo poner esta herramienta en marcha. ¡Te lo explicamos!
En primer lugar, no improvises. Para valorar algo, debes conocer de qué vas a hablar y establecer unas pautas. Asimismo, es recomendable planear una cita con el trabajador para que llegue receptivo al mensaje que vamos a ofrecerle.
Seguidamente, es importante la colaboración. Es decir, no se trata de decir qué hacer y cómo hacerlo, hay que encontrar soluciones conjuntas. El líder debe guías a los empleados, pero no manejarlos forzosamente. Deja que resuelvan los problemas, tú simplemente trata de orientarle y ayudarle para que llegue al lugar que deseamos.
Otra cuestión que deberías tener en cuenta es la individualización. No felicites a todo el equipo por sus buenos resultados, estudia a cada trabajador y dale un feedback positivo a cada uno cuando lo merezcan. De este modo, todos sentirán que contribuyen enérgicamente al proyecto.
Además, no hace falta que todos los días “des una palmadita en la espalda” a los trabajadores. Es clave dosificar el feedback positivo para mantener la motivación de los empleados elevada. De lo contrario, acabará siendo una rutina y dejará de incentivarles.
El último consejo para poner en marcha la retroalimentación positiva es prestar atención a la comunicación no verbal. Tus gestos también transmiten el mensaje, así que no te olvides de ser coherente con lo que dices y piensas, sino…¡lo notarán!
El coaching para mejorar la comunicación positiva
El coaching es una disciplina que cada vez se extiende más en el ámbito laboral. Los coach orientan a las empresas, mejor dicho, a los miembros de las organizaciones a conseguir sus metas.
Es decir, se trata de un “entrenamiento” para mejorar como individuos y, en este caso, poder aplicarlo al negocio. En el feedback positivo, el coaching puede ser de gran relevancia para aprender a ejecutarlo y sacarle el máximo partido.
Por ello, te animamos a realizar nuestro Máster en Inteligencia Emocional y Coaching u otros estudios de esta área dentro de tu organización. Con la formación bonificada podrás ofrecer formación sin coste a tus trabajadores y aportarles un mayor valor para su desempeño. ¿Vas a perder esta oportunidad?