¡Descubre algunas formas originales de motivar a los empleados! No vamos a negar que ser jefe puede ser llegar a ser complicado en algunas ocasiones. La figura de responsable o directivo suele estar ligada al “malo” de la película: autoritario, egoísta y frustrado. Pero probablemente esto sea solo una pequeña parte de la realidad.
¿Tú no eres así, verdad? ¡Demuéstralo! La motivación de los empleados es una de las formas más evidentes de hacerlo visible. Además, tiene grandes beneficios tanto para los trabajadores como para la propia organización. En otras palabras, motivar a la plantilla logrará que tu empresa siga creciendo y sea más exitosa. ¿Quieres saber más?
En primer lugar, fórmate. ¿Cómo? Nuestro Curso en Coaching Empresarial y Entornos VUCA puede ser el comienzo. Con este estudio serás capaz de aprender a adaptarte a las necesidades que van surgiendo en el panorama actual. También puedes profundizar en este ámbito con nuestro Máster en RR.HH. que te ofrecerá una visión especializada para tratar con el capital humano.
Ejemplos de formas originales de motivar a los empleados
A continuación vamos a elaborar una lista con algunas formas originales de motivar a los empleados. ¡No seas cutre y échale imaginación! Si estas pensando en un salario mejor, no es la solución (no la única). ¡Trabaja en hacerlos sentir bien!
1. Que cada trabajador esté en el lugar adecuado
Aunque puede que esto no sea lo más original del mundo, muchas empresas no lo aprovechan. No hay ningún misterio, simplemente se trata de que cada persona ocupe el puesto que le corresponde atendiendo a sus capacidades. Es decir, valora a cada empleado y ajusta su carga de trabajo en base a su propio perfil.
2. Ofrece los recursos necesarios para el desempeño
Puede que esta tampoco destaque por su originalidad, pero es muy importante. Imagina cómo podría trabajar un albañil sin materiales de construcción. Sería frustrante, como si un diseñador gráfico no cuenta con un software específico para realizar su trabajo. Todos los empleados, por tanto, deben tener acceso a los recursos necesarios para desarrollar sus tareas de un modo eficiente.
3. Felicita a tus empleados y diles que esperas de ellos
¿Un trabajador ha hecho algo bien? ¡Felicítalo! Trasládale tu enhorabuena por su buen hacer. Aunque sea obvio, tu reconocimiento ayudará a aumentar su motivación. Además, no te olvides de indicarle lo que esperas de él. Es decir, cuáles son los resultados que esperas que consiga. ¡Hazlo de forma periódica!
4. Potencia la autonomía de los trabajadores
Deja que asuman responsabilidades, que tomen sus propias decisiones,…que sean independientes. Agobiarlos con multitud de reuniones o informes no les hará más productivos, es más, puede ser contraproducente. Déjales que demuestren que saben lo que hacen y apóyales.
5. Facilita la promoción y el crecimiento laboral
Todos necesitamos que nos valoren y nos den la oportunidad de seguir creciendo y autorrealizándonos. Por este motivo, una forma original de motivar a los empleados es con los planes de crecimiento y promoción dentro de la empresa. Esto permite que sean ambiciosos y deseen alcanzar metas cada vez mayores.
6. Escucha a tus empleados
Se trata de conocer a los trabajadores más allá de las tareas que realizan en la empresa. Descubrir qué le gusta, ayudará a aumentar su motivación. No consiste en meterse en su vida privada, sino en un acercamiento a sus intereses y a establecer una relación cercana.
7. Permite la flexibilidad
Si confías en ellos (deberías hacerlo), no habrá ningún problema para permitir los horarios flexibles. De esta forma, los trabajadores pueden organizarse para conseguir la máxima conciliación pero sin descuidar su desempeño laboral.
En este mismo sentido, debes respetar su tiempo. Igual que deseas que ellos lleguen a tiempo a trabajar, tú también debes cumplirlo. No cambies reuniones a última hora, no les pidas que alarguen su jornada, no les llames fuera del horario laboral,…
8. Promueve iniciativas que no tengan que ver con el trabajo
Salir a tomar algo después del trabajo, una carrera solidaria o traer el desayuno a la oficina son algunos ejemplos. Se trata de iniciativas que no tienen que ver con el desempeño en sí mismo, pero suceden con los compañeros de trabajo o dentro del entorno laboral. Permiten conocerse entre todos y generar un ambiente distendido.
Todas estas pequeñas acciones pueden mejorar la motivación intrínseca de tus trabajadores. De este modo, serán mucho más productivos a la vez que se sienten mejor en su día a día laboral. Sin duda, es una tarea a la que se debe prestar atención desde los RR.HH. en continua comunicación con la dirección.