Habilidades cognitivas

Las habilidades cognitivas en el entorno laboral

La mente es una herramienta poderosísima. Por ello, el cerebro es el motor de los seres humanos, el cual permite la interacción con el entorno. ¿Pero cómo? Gracias a las habilidades cognitivas somos capaces de comprender lo que nos rodea.

Mediante los cinco sentidos recogemos los estímulos y los procesamos. De este modo, se conforma la inteligencia. Es decir, la suma de todas las habilidades cognitivas de un individuo da como resultado la capacidad intelectual de esa persona.

Adquisición de las habilidades cognitivas

Es en la infancia cuando comenzamos a adquirir y desarrollar estas habilidades. No se trata de una cuestión innata en nosotros, sino que construimos a lo largo de nuestra vida. Por ello, cada uno de nosotros contamos con unas capacidades propias.

Los estímulos que recibimos en las edades más tempranas son claves para el desarrollo cognitivo y biológico. Por este motivo, es el momento idóneo para potenciar la estimulación y conseguir mejorar en:

  • Procesos de aprendizaje.
  • Interacción en contextos sociales.
  • Percepción, recopilación y comprensión de la información.

En este sentido, como hemos mencionado, hay que tener en cuenta que no se trata de una cuestión innata. Por ello, es posible entrenar las competencias para mejorarlas.

Tipos de habilidades cognitivas

Los seres humanos contamos con numerosas destrezas que nos permiten percibir los estímulos de nuestro entorno y reaccionar a ellos. Estas pueden clasificarse en dos grupos: básicas y superiores.

Procesos cognitivos básicos

La primera categoría, la básica, incluye aquellos que tienen relación directa con la información que captan los sentidos. En otras palabras, son los primeros receptores de la información. En este grupo destacan las siguientes habilidades:

  • Memoria: nos permite almacenar la información para poder recuperarla posteriormente. Existen diferentes tipos que nos permitirán recordar a corto o largo plazo, a través de estímulos,….
  • Atención: es el “poder” de concentrarnos en un solo estímulo y omitir el resto. Sucede cuando somos capaces de poner el foco en un proceso concreto y eliminamos el “ruido” externo.
  • Lenguaje: está relacionado con el manejo de las palabras y la gestualidad. Es clave para la comunicación verbal y no verbal, y nos ayuda a expresar nuestros sentimientos, pensamientos, opiniones,…
  • Percepción: nos permite interpretar los estímulos físicos que recibimos del medio. Es decir, a través de esta habilidad somos conscientes de él.
  • Comprensión: es la clave para traducir los estímulos que captan nuestros sentidos. Nos ayuda a elaborar nuestros pensamientos, clasificar la información,…

Procesos cognitivos superiores

Es fácil adivinar que estas habilidades van un paso más allá de las básicas. Por lo tanto, requieren un mayor nivel de aprendizaje y desarrollo ya que son la combinación de las anteriores. Dando lugar a unas capacidades superiores que nos permiten multiplicar la comprensión e interacción en el entorno. Algunas de ellas son las siguientes:

  • Metacognicción: podemos definirla como la capacidad para darnos cuenta de nuestros pensamientos. O sea, ser conscientes de que estamos pensando.
  • Motivación: es cuando ponemos toda nuestra energía a disposición de algo que nos apetece y nos hace sentir bien.
  • Emoción: sucede cuando expresamos nuestros sentimientos a través de las diferentes emociones.
  • Aprendizaje: si unimos la memoria con la percepción logramos comprender, interpretar y generar personamientos que nos ayuda a la adaptación al medio.
  • Razonamiento: nos permite elaborar conclusiones sobre lo que percibimos.

Estas son solo algunas de las habilidades cognitivas superiores que podemos desarrollar los seres humanos. No obstante, el grado de desarrollo dependerá de múltiples factores.

Habilidades cognitivas en la empresa
El entrenamiento de las habilidades cognitivas es posible ya que no se trata de capacidades innatas.

¿Qué buscan las empresas?

Cuando las compañías están buscando nuevos perfiles para incorporar a las empresas, ¿qué buscan? Seguro que el primer pensamiento es…¡formación! Y, por supuesto, no es erróneo. Las empresas demandan profesionales altamente cualificados y especializados en las áreas de su sector. Pero, ¿qué más?

En los últimos años, las organizaciones no se conforman con profesionales con una buena formación. Por ello, requieren personas con habilidades y aptitudes más allá de los conocimientos académicos, pero  que, al fin y al cabo, acaban determinando su desempeño.

Es en este punto donde las habilidades cognitivas aparecen en un plano estelar. Pues estas permiten que cada persona optimice su labor dentro de la compañía. ¿Quieres saber cuáles son las capacidades cognitivas que más valoran en los procesos de selección?

Evidentemente, la memoria es una de las más relevantes, ya que permite asociar situaciones del pasado y el presente. Generando líneas temporales con información relevante, que permite unir conceptos y realizar conclusiones.

Las cuestiones relacionadas con la resolución de problemas y la toma de decisiones son imprescindibles. Dentro de cualquier puesto de trabajo se requiere contar con estas habilidades para afrontar las problemáticas diarias y responder de un modo eficiente.

Por otra parte, las compañías buscan personas capaces de planificar. Es decir, idear su ruta de trabajo o de proyectos con el fin de tener todo en cuenta. De esta forma, se limita la incertidumbre y se mantiene un control riguroso.

Además de estas capacidades, las organizaciones buscan personas que se adapten a las diferentes situaciones, generen respuestas adecuadas, no se dejen llevar por los sentimientos negativos,…

Para ser capaz de ver todas estas habilidades cognitivas y valorarlas, los profesionales de los RRHH deben contar también con ellas. Además, evidentemente, es necesaria una formación especializada. Nosotros ponemos a tu disposición un amplio catálogo de estudios en esta área para que puedas seguir creciendo.