La organización empresarial es clave para su buen funcionamiento y para su éxito. Aunque tradicionalmente la organización vertical era la norma cada vez es más frecuente encontrar ejemplos de organización empresarial horizontal. La realidad es que existen distintos tipos de organización de una empresa. ¿Estás pensando en reestructurar tu compañía o iniciar un negocio y necesitas organizar la empresa adecuadamente? Conocer cuáles son y sus principales ventajas te ayudará a decidir el modelo ideal para la misma.
Tipos de organización empresarial, ¿cuál elegir?
Organización vertical, frecuente pero cada vez más cuestionada
Esta forma de organización de una empresa es la más frecuente. Es una organización jerarquizada. El liderazgo bien ejercido es clave para su éxito ya que el pilotaje de la empresa es esencial para que los subordinados conozcan y asuman sus responsabilidades en una estructura formal y con poco margen para el intercambio de funciones entre cargos.
La principal desventaja de la organización vertical es que los empleados raramente verán la empresa como un todo, sino que lo harán de un modo muy compartimentado. Y esto dificulta el hacer equipo e interactuar para lograr objetivos comunes entre distintas áreas o departamentos.
En estos casos un organigrama de empresa formal facilita que cada persona conozca su lugar y responsabilidades dentro de la empresa.
Organización horizontal, cada vez más popular
Entre los distintos tipos de organización de una empresa la estructura horizontal está ganando posiciones en la actualidad. Sus detractores la tildan de caótica y de provocar problemas por los egos de los empleados.
Quienes están a favor de esta, destacan la oportunidad para aprovechar el talento, habilidades e ideas de cada empleado de una forma global. Y la fácil interacción entre trabajadores de diferentes especialidades y con distintas habilidades para el mayor éxito de la empresa. Además, otra ventaja destacada de este tipo de organización de una empresa es la agilización de la toma de decisiones.
En cualquier caso la organización horizontal de la empresa también requiere de liderazgo. Este debe estar abierto a ser ejercido de forma firme pero sutil. Debe estar en manos de una persona abierta, que enriquezca y se enriquezca al mismo tiempo con las ideas y experiencias de los demás. Y que sepa llegar fácilmente a consensos.
Otros tipos de organización de una empresa; las estructuras más comunes
Dentro de la organización de una empresa a nivel interno hay diferentes tipos de estructuras que son especialmente populares por su facilidad para la gestión de la compañía. Estas son las más comunes, si bien existe un tipo conocido como organización mixta de la empresa que también es muy frecuente especialmente en compañías de gran tamaño. Y es que combina varias de las mencionadas a continuación.
Organización por funciones
En este caso la organización de una empresa divide esta en áreas o departamentos en base a las funciones que se ejercen en cada uno de ellos. Así se puede dividir, por ejemplo, en administración, fabricación, logística y almacenaje entre muchas otras. Siempre según el tipo de empresa, sector y trabajos que se ejerzan en ella.
En este tipo de organización empresarial es común encontrar una persona o área de dirección encargada de coordinar las acciones y trabajos de los distintos departamentos. Aunque también existe la posibilidad de que el director, encargado o líder de cada departamento forme parte de un grupo común de toma de decisiones mancomunadas.
Organización por productos o servicios
Según el tipo de empresa y su razón de ser, esta puede organizar su estructura en base a los productos o servicios que ofrece al público. Esto generalmente solo tiene sentido en aquellas organizaciones empresariales que abarcan una gran diversidad de estos productos o servicios. La razón es que dividirlos de esta forma facilita mantener una estructura activa bien organizada día a día.
No obstante este tipo de organización de una empresa no es exclusivo de grandes compañías con diversidad de oferta. También se encuentra en otro tipo de empresas de pequeño o mediano tamaño. Por ejemplo, en un salón de belleza se puede dividir entre servicios de peluquería y servicios de estética. O en una clínica entre gabinete de fisioterapia, servicios de odontología o de cualquier otra especialidad médica.
Organización geográfica
Esta solo tiene sentido en dos tipos fundamentales de empresas. Por un lado aquellas que operan en zonas geográficas diversas y con diferencias culturales, idiomáticas o legales importantes entre ellas. Y en aquellas que disponen de centros de trabajo en lugares diversos de la geografía nacional o internacional.
Aunque es también un tipo de organización común en empresas comerciales, que disponen de divisiones según la zona en la que operan sus profesionales.
Organización de una empresa según sus tipos de clientes
Este es un tipo de organización muy habitual en algunos sectores. Por ejemplo en alimentación, donde estos se dividen generalmente entre mayoristas y consumidores particulares. Aunque también se utiliza en otros sectores y con otro tipo de división de la clientela. Por ejemplo, en el sector bancario es frecuente la división entre la cliente empresarial y la particular.
La organización de la empresa es un punto clave para su día a día, su óptima gestión y buen funcionamiento. Por ello es importante dedicar el tiempo necesario a decidir qué tipo o modelo es el indicado. Así como si es o no necesaria una restructuración de la misma para un mayor éxito de la compañía.