Contratar personal no es fácil. Desde fuera puede parecer una tarea rutinaria donde el candidato perfecto llega casi por arte de magia. No obstante, para que aparezca la persona idónea es imprescindible saber qué buscamos. ¿Sabes cómo hacerlo? El profesiograma puede ser tu gran aliado.
En la actualidad el mercado laboral es muy amplio. De forma continua aparecen nuevas profesiones y los trabajadores cada vez cuentan con una mejor formación. ¿Entonces cuál es el problema? Básicamente encontrar al postulante que se ajuste a lo que requiere nuestra empresa.
Es decir, puede que haya millones de personas con una cualificación excelente, pero solo uno que tenga las habilidades necesarias para el puesto a cubrir. Este documento permite definir las funciones minuciosamente para que desde recursos humanos puedan seleccionar al candidato perfecto.
Profesiograma: recopilación de aptitudes y capacidades
Este documento laboral debe ser elaborado por el departamento de recursos humanos en colaboración con otros miembros de la empresa como la dirección. Debe incluir elementos como el nombre del puesto, habilidades y requisitos necesarios para realizar sus tareas.
De esta forma, a la hora de seleccionar personal será más fácil encontrar a la persona que encaja perfectamente con lo que la empresa necesita. Asimismo puede ser útil para disminuir la tasa de rotación y aumentar el compromiso de los empleados.
Si se realiza un proceso de selección correcto, habremos encontrado al profesional que puede ocupar el puesto y sabe cómo hacerlo. De este modo, se puede evitar contratar a personas que no cuenten con todas las habilidades o ajustar los salarios a las capacidades demandadas.
En este sentido, para usar rigurosamente este tipo de herramientas es necesario contar con una formación previa como nuestro Máster en Recursos Humanos. Es decir, no se trata de llegar y apuntar lo que se nos ocurra. Es imprescindible tener una perspectiva profesional para realizar un documento útil.
De lo contrario, puede que la información que incluimos sea demasiado superficial y no estemos definiendo el puesto con la profundidad necesaria. En consecuencia, la selección de personal no será tan exacta como debería.
Elementos que debe incluir un profesiograma
Un profesiograma puede realizarse en distintos formatos e incluir diferentes elementos como tablas o gráficos. Además, cada documento será distinto, pues cada puesto o empresa tiene sus propios requisitos, objetivos,…
Por lo tanto, al realizar un profesiograma debemos tener en cuenta las características del puesto y así le daremos forma a nuestro documento laboral. No obstante, hay cierta información que es recurrente independientemente de las variables:
- Nombre y categoría del puesto.
- Objetivos del puesto: ¿cuáles son las funciones que deben desempeñar dentro de la empresa? ¿Qué metas debe alcanzar en consecuencia?
- Responsabilidades derivadas de la actividad.
- Relaciones con otros puestos: ¿depende de otros? ¿tiene una posición superior? ¿trabaja de forma individual o grupal? ¿a qué departamento pertenece?
- Condiciones físicas requeridas.
- Requerimientos para ocupar el puesto: formación, habilidades sociales, aptitudes, herramientas,…
- Posibles riesgos del puesto.
- Información extra: características de la empresa, horario, salario,…
En definitiva, todos los datos que podamos aportar serán bienvenidos para crear un perfil específico que ayude a encontrar a la persona idónea. Y, no solo eso, también es útil para dar la información clave a los candidatos. De este modo, ambas partes pueden saber si encajan y tienen los mismos intereses.
Tipologías: por factores y por competencias
Como hemos mencionado, el profesiograma no tiene una estructura rígida e inamovible. Pero existen dos modelos desde los que podemos partir para diseñar nuestro documento.
Profesiograma por factores
Se incluyen las características del puesto con el máximo detalle. Se deben anotar tanto los aspectos físicos como psicológicos. Así como las aptitudes que la empresa considera indispensables para el desarrollo del puesto en concreto.
Este modelo se utiliza frecuentemente en los procesos de incapacidad permanente. De esta forma, se puede atestiguar frente al juez y el Instituto Nacional de Seguridad Social (INSS) los requisitos que el puesto exige en su desempeño.
Profesiograma por competencias
El segundo modelo es el más frecuente en procesos de selección y, por tanto, el más utilizado por el departamento de recursos humanos. Esto se debe a que se establecen las habilidades y conocimientos que debe poseer el empleado.