Proyecto empresa e iniciativa empresarial deben ir de la mano. Redactar un buen proyecto empresarial es clave para presentarlo a posibles inversores y para obtener una guía propia que te ayude a poner en marcha tu proyecto empresa. Si estás pensando en emprender e iniciar un negocio contar con un proyecto plan de empresa es esencial. Estos consejos te ayudarán a incluir elementos esenciales. Pero también a hacer que su presentación sea más atractiva ante quienes pueden ayudarte a convertir en una realidad tu proyecto de negocio.
Consejos y trucos para redactar un proyecto empresarial
Incluye una justificación de negocio al inicio de tu proyecto empresarial
Es una buena forma de comenzar la redacción de un proyecto empresarial. Este debe incluir información relativa a la razón de ser del negocio. Es decir, en qué consiste y con qué motivaciones se crea. Si no es un proyecto unipersonal, es importante mencionar quiénes forman parte de él y de qué modo lo hacen.
Haz un listado de primeras acciones para la constitución del negocio
Te servirán de guía de acción. Pero también mostrarán tu implicación y cómo comenzarás a dar los pasos necesarios para convertir tu proyecto empresarial en una realidad. Es decir, de qué modo actuarás para pasar de una idea a la constitución de una empresa operativa.
Esto incluye los trámites administrativos y legales que debes llevar a cabo para los primeros latidos de vida de tu empresa.
Sé breve, conciso y claro
Evita el uso de palabras complejas y expresiones manidas. Exprésate con brevedad y concisión. Elimina la paja de tus textos. Sé claro, no uses léxico complicado tratando de que suene más trabajado. Ante la duda, simplifica.
Incluye un análisis DAFO en tu proyecto empresarial
Este es un punto importante de un proyecto plan de empresa y merece la pena dedicar tiempo. El análisis DAFO es clave tanto para ti por el valor de su información para tu estrategia empresarial. Y para todo inversor interesado en tu negocio. Y para presentar tu proyecto empresarial para la concesión de becas y ayudas.
Es interesante presentarlo con un resumen visual. Pero también que cuente con una redacción clara y atractiva que amplíe la información presente en este.
Presta atención a los detalles y la imagen que dan de tu proyecto empresarial
Quizá te parezcan algo menor pero en muchas ocasiones puede ser determinante para las sensaciones que provoca en quien lo lee. Y que son claves para su actitud ante tu proyecto empresa.
¿Algunos ejemplos?
- Utiliza una tipografía, tamaño de esta y color que facilite la legibilidad del documento.
- Haz una impresión de calidad, sin borrones y sin textos con zonas poco definidas.
- Evita las faltas ortográficas así como las faltas tipográficas.
- Emplea papel de calidad.
- Facilita el manejo y lectura del plan o proyecto. Por ejemplo con una encuadernación en canutillo de un tamaño manejable.
- Utiliza el color con moderación. Este puede ser interesante para gráficos o resúmenes visuales. Pero es prescindible en los textos. Puedes destacar aspectos que deseas sean tenidos en cuenta con otros métodos, como un tamaño de letra mayor, por ejemplo.
- Crea una portada cuidada y que proteja el interior. Evita que esta sea de simple papel como las demás hojas, para facilitar su uso y cuidado.
- Sé coherente con los valores que quieres destacar de tu empresa. Por ejemplo, utiliza papel reciclado y evita el uso de plásticos en la encuadernación si te presentas como empresa ECO.
Dedica un espacio exclusivo a las fuentes de financiación primeras y futuras
Cuando redactas y presentas un proyecto empresarial este debe mostrar que es viable. Desde el principio y a lo largo del tiempo. Por eso debes señalar con claridad cómo vas a obtener la financiación y fluidez económica que la empresa necesita para echar a andar y para mantenerse activa en los primeros años.
Este espacio financiero debe centrarse en primer lugar en la etapa inicial. Pero es interesante que incluya también cuestiones como estrategias de venta o planes de expansión factibles. Siempre aludiendo al flujo económico que se espera alcanzar en el futuro a corto y medio plazo.
Crea e incluye un plan de marketing
No es obligatorio hacerlo pero sí es conveniente. En él podrás mostrar los canales y estrategias que tienes pensado utilizar para promocionar tu negocio, llegar al público, captar clientes y fidelizarlos. Puedes aludir al ya mencionado análisis DAFO para señalar quienes son tus potenciales clientes y cómo vas a llegar a ellos en primer lugar. Y de qué modo quieres lograr la ansiada fidelización, tan importante para el éxito de un negocio.
Elabora y redacta un plan de recursos humanos
Proyecto empresa e iniciativa empresarial no siempre requieren de este, ya que existen negocios en los que únicamente el emprendedor es el factor humano del negocio. Pero siempre que haya más personal, es importante que tu proyecto empresa incluya un plan de recursos humanos.
En este plan puedes señalar una descripción de los puestos de trabajo y el perfil profesional adecuado para cada uno de ellos. También es conveniente incluir condiciones laborales como horarios de trabajo, turnicidad si la hubiera e incluso salarios estimados para estos. E incluso las vías que utilizarás para captar el talento humano que tu empresa precisa.
Ten en cuenta estas cuestiones al redactar tu proyecto empresarial. Aunque partas de una plantilla o guión preconcebidos. Son aspectos claves que serán valorados por las personas interesadas en tu negocio.