Liderar equipos conlleva la toma de decisiones, a menudo complicadas, de forma frecuente. El liderazgo empresarial requiere de personas con capacidad para la toma de decisiones rápidas. Incluso bajo presión. Independientemente de los estilos de liderazgo que cada uno siga. Si te preguntas cómo ser un buen líder una de las claves es aprender a tomar decisiones con rapidez lo que no quiere decir de forma espontánea o sin pensar. Las sesiones de coaching y liderazgo pueden ayudar a saber cómo tomar decisiones importantes en un entorno empresarial y de forma eficiente.
Los pasos que te ayudarán en el proceso de la toma de decisiones
Identifica el problema
Lógicamente antes de la toma de decisiones está el planteamiento del problema o cuestión sobre el que decidir. Conocer cuál es el obstáculo o la discrepancia entre lo que es y lo que consideramos debería ser es esencial para poder aportar una solución al respecto.
Posibles soluciones o alternativas
¿En qué vas a ayudarte para tomar una decisión? Puedes utilizar tu propio criterio, el de un experto, valorar opiniones de personas con experiencia en el tema o cuestión a resolver. También utilizar un sistema de pros y contras para una toma de decisión fundamentada. A su vez puedes valorar varias alternativas personalmente o con colaboración de otros. Tú decides cómo deseas afrontar la toma de decisiones. Generalizando, escuchar a otros siempre es buena idea aunque la toma de decisiones definitiva sea cosa tuya. Pero en la práctica muchas veces se espera una solución rápida que no deja lugar salvo a decidir uno mismo.
Posibles alternativas
En este paso -y para una toma de decisiones acertada-, es importante plantear varias soluciones o alternativas al problema planteado. Salvo que se trate de una toma de decisión rápida no es momento de evaluar las mismas, sino simplemente de plantearlas. La idea es disponer de distintas posibles soluciones a un mismo problema.
Evaluación de alternativas
Es el proceso en el que analizas y valoras las distintas propuestas o posibles soluciones al problema planteado. A menudo implican valorar pros y contras o ventajas y desventajas de cada una de ellas. Así como las consecuencias que derivarían de las mismas.
Selección de opción o toma de decisiones
Es un paso especialmente importante porque podríamos decir que es en este en el que realmente se toma una decisión para solucionar el problema o cuestión a resolver. Tras el análisis de las opciones o alternativas llega el momento de elegir la adecuada para dar solución a la cuestión sobre la que decidir. En el caso de liderazgo empresarial jerarquizado la toma de decisiones no culmina ahí. En ese caso suele ser el momento de plantear a los superiores el problema, la solución elegida y los motivos de la misma. Según la estructura de la empresa o los estilos de liderazgo de la misma tendrás que presentar alguna alternativa descartada señalando por qué se pensó en ella y por qué finalmente se descartó en beneficio de la elegida.
Este paso del proceso de toma de decisiones puede ser muy fácil o extremadamente complicado según el tipo de liderazgo empresarial, la jerarquización e incluso el carácter de las personas implicadas en la toma de decisión definitiva.
Estilos de toma de decisiones más frecuentes
Al igual que existen distintos estilos de liderazgo -o formas de liderar equipos-, existen diferentes formas de afrontar la toma de decisiones en la empresa. En principio no se pueden calificar como mejores o peores según el caso. En realidad, es a partir del análisis de los resultados cuando plantearte si tu estilo de toma de decisiones da buenos resultados. O si por el contrario te conviene modificar tu estilo para poder tomar decisiones más acertadas.
Estilo directivo
Es el que ejercen las personas resolutivas, analíticas y racionales. Estas personas son capaces de tomar de forma rápida -e incluso bajo presión-, decisiones importantes con criterio y no por intuición. Su capacidad les permite un análisis rápido y certero. Incluso con pocas alternativas e información para una toma de decisiones rápida.
Estilo analítico
Son capaces de considerar un gran número de alternativas interesantes analizándolas en profundidad para una toma de decisiones bien argumentada y fundada. Este estilo implica racionalidad para analizar en detalle cada posible solución.
Estilo conceptual
Es propio de una personalidad intuitiva y con capacidad para plantear soluciones creativas a conflictos o problemas. Estas personas son capaces de procesar un elevadísimo volumen de información, así como de analizar esta con una gran amplitud de mira, una perspectiva extensa y desde diferentes ángulos relacionados con la cuestión a resolver y sus consecuencias. Son capaces de valorar la mejor decisión a largo plazo.
Estilo conductual
Este estilo de toma de decisiones es propio de personas intuitivas y con una gran capacidad de escucha y aceptación de sugerencias, ideas y planteamientos de otros.
Consejos para la toma de decisiones empresariales
- Valora opciones creativas.
- Ten siempre un plan ‘B’ por si la decisión elegida resulta no ser adecuada o no es bien valorada por tus superiores.
- Analiza los datos de manera precisa.
- Prueba nuevas herramientas o métodos para analizar los datos y tomar buenas decisiones de empresa.
- Sin buenos datos es difícil tomar buenas decisiones. Para una buena toma de decisiones utiliza métodos de recabación de datos adecuados.
La toma de decisiones es parte imprescindible del día a día de las personas encargadas de liderar equipos. Si te planteas cómo ser un buen líder debes aprender el proceso de toma de decisiones adecuado para solucionar problemas y conflictos de diferente índole.